Entrevista a Julio Barbaro

“Que les quede claro a todos que la multa es cierta, dura y cara”

El Interventor del Comfer habló con R&TA de las posibles sanciones a los canales que emitieron el show de Nazarena Vélez en el ciclo “Bailando por un sueño”, considerado “obsceno” por las autoridades. Así, afirmó que este es “el primer gobierno que no condona deudas a cambio de publicidad política”.

“Todo el mundo controla las emisiones y respeta la libertad. Sólo sociedades en conflicto político pueden creer que castigar una trasgresión es ir contra la liberta de prensa”. Así comenzó su charla con R&TA el interventor del Comfer, Julio Bárbaro, en referencia uno de los temas más comentados del momento: la posible sanción a varios canales por emitir -en el caso del 13- y repetir durante la tarde, el baile de la vedette Nazarena Vélez en el ciclo “Bailando por un sueño”, de Marcelo Tinelli.
Ante esto, el comité evaluador de organismo, siguiendo los pasos establecidos en la ley de procedimientos administrativos, elaboró en su etapa final un informe -que sirve de sustento para iniciar el sumario administrativo pertinente- y notificó a los canales “para que tomen vista de las actuaciones y de la grabación”, explicó Claudio De Cousandier, director de Evaluación y Control.
En el escrito se establece que las escenas son “obscenas”, lo que representa una falta para la legislación. A esto debe sumarse que la Asociación de Teleradiodifusoras Argentinas (ATA), la Asociación de Televisión por Cable (ATVC), la Asociación Radiodifusoras Privadas Argentinas (ARPA) y la Cámara Argentina de Productoras Independientes de Televisión (Capit) firmaron una serie de pautas básicas donde acordaron evitar este tipo de contenidos.
Después de la notificación, los canales tienen 10 días hábiles para analizar el contenido y pruebas del informe y cinco días hábiles más para hacer su descargo.
En caso de establecerse la sanción, las multas oscilarían entre tres mil y 50 mil pesos, dependiendo de los casos.
“La sociedad exige límites y aún los productores reconocen que ellos también los quieren. Juegan con los límites porque juegan con el rating”, continuó Bárbaro.
Por otro lado, aclaró que este es “el primer gobierno que no condona deudas por publicidad política. En este momento llegamos a dos millones de pesos ejecutables por la justicia de deuda de multa. No los cambiamos por nada”.
Y agregó: “Que les quede claro a todos que la multa es cierta, es dura y es cara”.
Con esto, el funcionario espera un cambio de actitud de parte de los canales. “Cuando les caiga la ejecución judicial y tengan que emitir 200, 300, 500 cada uno, después les va a pasar como el que se quemó con leche: cuando ve una vaca, llora”.
Para el interventor, “la lógica sería que representantes de las religiones y ONG, junto con el Estado y los dueños de los canales, tuvieran una mesa de diálogo donde puedan formular cuáles son las situaciones que se tienen que marcar como lógicas para que el entretenimiento y formación que da la TV no se transforme en cualquier otra cosa”.
No obstante, esta propuesta no tuvo resultados en el pasado. “Cuando yo digo: escríbanme en letra impresa cómo son las reglas, dispara el más pintado. Lo hice con las religiones, les ofrecí que manden gente para acompañar a nuestros observadores; porque una cosa es gritar cuando aparece el desnudo y otra es estar 24 horas mirando hasta que aparezca.”
Bárbaro arremetió también contra los comentarios que se hicieron del tema, especialmente en el periodismo. “Cuando se ponen a hablar de estas cosas cada uno dice su originalidad, que vendría a ser su estupidez”.
Finalmente, repasó la situación de la TV en el país. Así afirmó que el que no tiene cable en la Argentina, “pasado los 100 Km, no existe. Hay un chico que tiene 70 ventanas para ver el mundo y otro que tiene una ventanita por donde ve la ropa tendida del fondo. Y la formación de uno y otro no es la misma”.
En este sentido, indicó que “el estado tiene que ofrecer gratuito el 10% de lo pago. Si el cable tiene 70, los gratuitos tienen que ser siete”.
Aquí resaltó la necesidad de autorizar a los canales de chicos, de corto alcance. “Es un tema que tenemos que resolver”, reconoció.
“Tenemos la mejor televisión paga de América Latina, pero la peor televisión gratuita”, prosiguió. Sin embargo, remarcó la cantidad de señales que se producen en el país. “Parecería que el cable, que es una pérdida enorme en su origen, nos dio un saber televisivo, que hoy nos convierte en grandes productores de medios”.
Ahora, resta esperar una mejoría en los canales de aire. “Cuando lo gratuito sea digno, lo pago será legitimo”, concluyó.