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Cada 30 minutos

El Comfer reglamentó los cortes publicitarios en las películas

Mediante la resolución 252/08, firmada por el interventor Gabriel Mariotto, el Comfer reguló la publicidad en las películas emitidas en cable, estableciendo cortes cada 30 minutos.
En el escrito, se estipula que “la transmisión de obras audiovisuales tales como largometrajes cinematográficos y películas concebidas para televisión, realizada por señales transmitidas a través de servicios complementarios, podrá interrumpirse una vez cada periodo completo de treinta (30) minutos”.
Ante esto, el cronista comercial publicó que la Cámara de Productores y Programadores de Señales Audiovisuales (CAPPSA) presentaría un recurso de amparo para no modificar la medida. Sin embargo, Eduardo Suarez, gerente de CAPPSA, lo desmintió en diálogo con R&TA y afirmó que “no están ni a favor ni en contra” de la resolución sino que aún “se está estudiando”.
De esta manera, se deroga la resolución 1391-Comfer/03, que proclamaba que las películas que emitan los servicios complementarios de radiodifusión debían ser “emitidas en su totalidad sin interrupciones de ninguna índole”.
Esta medida –que se dictó durante la administración de Julio Bárbaro- iba a entrar en vigencia el 1 de abril de 2004, pero fue prorrogada en varias oportunidades sin llegar nunca a ser efectiva.
En parte, su suspensión se debió al reclamo de las señales de cable que por entonces remarcaron la necesidad de continuar con la emisión de publicidad para sostener el negocio, sobre todo, después de la crisis del 2001 y la devaluación. Y es que, una vez abandonada la paridad cambiaria, las empresas del sector encontraron en la publicidad su principal fuente de ingresos, remplazando de a poco la venta de afiliados.

Luego del episodio en la agencia de noticias

Granovsky confirmó que “Télam quiere ser parte querellante”

El presidente de Télam, Martín Granovsky, confirmó que pedirá ser querellante en la investigación judicial por la irregularidad que el propio subgerente general, Carlos Fernández, denunció ante la comisaría segunda de la Policía Federal.
Todo ocurrió el viernes 2 de mayo, cuando móviles policiales se apostaron en la puerta de la agencia de noticias. Ese día, Fernández le informó a Granovsky que encontró un sobre con dinero. “Tenía 15 mil pesos y no le pertenecían ni a él ni a la agencia”, según indicó el presidente en un comunicado.
A partir de entonces, los directivos denunciaron un posible intento de soborno de Action Media, una agencia de publicidad que estaría vinculada a allegados del secretario de Medios, Enrique Albistur.
Según un escrito del propio Granovsky, “hasta ese momento el episodio sólo era el extraño hallazgo de un dinero que no pertenecía a un empleado ni a Télam. Todo cambió cuando llegó a la agencia José María Núñez Carmona, representante de la firma de Action Media. En presencia de la empleada de la escribanía, realizó una alusión que parecía indicar un nexo entre el dinero del sobre y la mayor agilidad de unos trámites administrativos tendientes al cobro de facturas de Action Media”, prosiguió.
Y aclaró: “Télam no acepta sobornos. Es una empresa pública: no se vende ni se alquila”.
Por otra parte, allegados a Albistur, acusado de manejos irregulares de la pauta oficial por el fiscal de investigaciones administrativas, Manuel Garrido, y por el juez Octavo Aráoz de la Madrid, dejaron entrever que el incidente en Télam se trató de una maniobra para perjudicar al secretario de Medios.