Radio Nacional busca renovar equipamiento para ahorrar gastos

El caso Supernova

La música clásica busca un nombre

Aún hay dudas por LV8 de Mendoza




Página 12

 

 


Página 12

Lo confirmó Mario Giorgi

Radio Nacional busca renovar equipamiento para ahorrar gastos

Aseguran que la estructura técnica de los años 50 provoca erogaciones evitables por 200 mil pesos. Por eso piensan invertir 1,5 millón y ahorrar al menos el 50% de gastos por electricidad. Ya comenzó el nuevo perfil en las FM y sostienen que el caso Supernova está “terminado”.

La nueva gestión en Radio Nacional avanza con una propuesta de mejorar el equipamiento de sus 80 estaciones en todo el país para ahorrar gastos innecesarios de funcionamiento producto de una estructura técnica obsoleta y desactualizada.
Así lo adelantó a R&TA en exclusiva el director de la radio, Mario Giorgi, quien negocia por estos días con la secretaría de medios una partida de 1,5 millón de pesos para renovar gran parte de los equipos y evitar así la erogación de más de 200 mil pesos bimestrales en conceptos de servicios.
“El reequipamiento contribuirá a aminorar los gastos que se producen en gran parte por la utilización de equipos obsoletos con sistemas valvulares que si se transistorizaran se ahorraría casi un 50% de energía eléctrica”, sostuvo el funcionario.
La idea de aggiornar la estructura, que data de la década del 50, cuando se inauguraron las emisoras, también responde a la necesidad de mejorar la calidad del servicio con mejores niveles de audio.
En este sentido, también se encuentra en estudio un proyecto del diputado Lorenzo Pepe para interconectar las estaciones por satélite desde Tartagal hasta Ushuaia. La iniciativa surgió dentro del mismo seno de la radio, ya que en zonas como la Patagonia, las emisoras están conectadas vía coaxil y eso genera importantes gastos en telefonía.
“Eso se produjo –dijo Giorgi- porque no se compraron las parábolas del tamaño justo para captar las señal satelital. Si pudiéramos cambiarlas, el costo de inversión se amortiza con el ahorro en el uso del teléfono”.
Y recordó que Nacional “cumple un rol social importante en muchos lugares donde no llegan las estaciones comerciales”, por lo que una mejora en las condiciones técnicas repercutirá en la calidad de información que llega a todo el país.
Para el locutor y periodista que está al frente de la cadena nacional, “en un par de años se amortizan las inversiones, se empieza a ahorrar dinero y se mejora el servicio en cuestiones de calidad de audio”.

La traba presupuestaria

Consultado sobre la viabilidad de la propuesta en el corto plazo, el directivo sostuvo que aspira al menos a “sentar las bases para que la modernización de las estaciones cunda en la dirigencia política y presupuestariamente se pueda resolver más allá de un triunfo propio”.
Sin embargo, la realidad de las partidas para los medios públicos, estimadas en 46 millones de pesos para este año por el interventor Marcelo Simón, es analizada en la radio como un presupuesto “exiguo”.
“Son 1000 empleados en todo el país y a pesar que los sueldos están al día aún estamos procurando resolver el problema de certeza de pago de haberes”, confirmó Giorgi.
Sobre este tema, el funcionario acusó a Darío Lopérfido por las desprolijidades en relación al presupuesto que nunca asignó a Radio Nacional con la creación del multimedios y denostó la iniciativa de incorporar a 5 emisoras al Sistema Oficial de Radiodifusión sin partidas. Se trata de LT11 Radio General Ramírez, LT12, Radio General Madariaga, LV19, Radio Malargue, LU4 Radio Patagonia Argentina y LU23 Radio Lago Argentino, las estaciones que nunca pertenecieron a Nacional y que son consideradas como las “estatales-comerciales” que ahora dependen de la ayuda financiera que llegó desde la propia secretaría de medios, a cargo de Carlos Ben.
En relación a la cuestión política sobre el funcionamiento de un sistema de medios, Giorgi cree que es necesario “buscar un mecanismo de las características de la ley de RTA basándonos en una idea que quede inmune a las situaciones de coyuntura política. Porque los que estamos en los medios como yo, desde hace más de 30 años, siempre aspiramos a hacer de esto un sistema de medios públicos en manos del Estado y no del gobierno de turno”. Por último, dedujo que “no es oficialismo” que el Presidente tenga un programa los sábados a las 9.30. “Constituye una agenda institucional y es muy bueno que por primera vez en la historia de la Argentina el primer mandatario utilice Radio Nacional para llegar a los ciudadanos”, aseveró el locutor al tiempo que se mostró confiado en su gestión ya que para él, “volver a Nacional es volver a mi casa”.

 

Más de mil personas protestaron frente a Radio Nacional

 


El caso Supernova

Desde el 1° de abril, la música clásica separó al rock en el 96.7. Fue el fin de la FM Supernova, la emisora creada por Darío Lopérfido que congregó al público joven en una frecuencia de Nacional.
Diez días antes del cierre, más de mil personas protestaron con un recital que cortó la calle Maipú al 500 y bajo el lema “No, no y no”, los casi cien trabajadores aseguraban a la prensa que era injusto terminar con una radio donde “cientos de grupos obtuvieron por primera vez la posibilidad de tocar y donde escritores e intelectuales elevaron la calidad de la programación”.
Sin embargo, la decisión ya estaba tomada y pese a la gran convocatoria, Mario Giorgi no paró en su idea de “recuperar un histórico canal de frecuencia modulada de música clásica”.
Según contó el funcionario, recibió a la gente de Supernova y les ofreció seguir en la nueva radio Faro, la 87.9 que se destinará a las prácticas de estudiantes de comunicación. “Pero no quisieron y el lema “No, no y no” fue poco constructivo para la negociación”, sostuvo.
Por otro lado, aclaró que sólo 5 personas tenían relación contractual con Nacional y no 100 como se dijo en un principio. Al parecer, estos últimos tenían convenios que había firmado la gestión anterior pero que no eran vinculantes ni de relación de dependencia.
“Cuando asumí me encontré con que Supernova estaba prácticamente en un estado de extinción porque al caer el gobierno de De la Rúa, la programación que generó Lopérfido se había terminado. El proceso de transición se cubrió con una programación veraniega hasta que llegamos nosotros y cerramos”, evaluó Giorgi.
Ahora, el funcionario justifica su postura en el hecho que la radio “nunca tuvo una actitud muy solidaria respecto de sus hermanas , ya que tenía aportes externos de la secretaría de Cultura con los que se pagaron los contratos artísticos”.
Para él, “mientras eso sucedía había otra realidad en el resto de las radios que generó desazón en mucha gente del interior al ver que en Buenos Aires había dinero para una y no para ellos”.
Por estos días, Giorgi prepara su discurso para exponer ante la Comisión de Libertad de expresión de Diputados, donde se encargará de sortear la preocupación legislativa sobre el tema.
“Me extraña que muchos diputados se molesten por el caso Supernova cuando en realidad Radio Nacional tiene 80 emisoras en todo el país y muchas de ellas con graves problemas. Lo importante es procurar proyectos para generar un sistema de medios más serio”, sentenció.


La música clásica busca un nombre

Si bien ya está en el aire desde hace dos semanas, la 96.7, el nuevo espacio de la música culta aún busca que los oyentes le asignen un nombre. La radio está manejada por el ex director del Teatro Colón, Juan Carlos Montero y se cree que en pocos días más gozará de identificación.
Por el momento, ya cubren la programación figuras del ambiente como Víctor Hugo Morales, Armando Rapallo, Jorge Roca, Marcelo Arce, Horacio Sanguinetti y Abel López Iturbe, entre otros especialistas que acercan la música clásica a fanáticos y novatos. En tanto, también se incorporaron las 14 personas que despidió la empresa Radio Clásica SA al abandonar su frecuencia, quienes trabajan bajo la figura de la coproducción.
Por su parte, desde el lunes 15 aparecen en la otra FM, Radio Faro, la programación especial destinada a dar un segmento a los alumnos de carreras de comunicación de la UBA, del ISER y de aquellos que estén en vinculación con los medios para que hagan su primera experiencia radial en el aire.


Aún hay dudas por LV8 de Mendoza

La Comisión de Comunicaciones de Diputados dio curso a un pedido de informes que el año pasado había solicitado el diputado Oscar González por el que se solicita al Comfer información acerca de una eventual entrega de LV8 Radio Libertador de Mendoza al grupo Telefónica en una privatización con irregularidades.
Allí, el legislador argumenta que existen anomalías dentro del expediente. Se trataría de “informes jurídicos y contables sin número y fecha y la inexistencia de dictámenes previos que avalen el proyecto de decreto” por el que se aprobó el concurso y la adjudicación de la licencia al oferente.
Según el diputado, Telefónica habría ofrecido 800 mil pesos tras haberse fijado en el pliego un precio base de 786.800 pesos, una cifra que no correspondería siquiera a la valuación física de la emisora, tazada en más de 1 millón cien mil más el valor de la licencia.
Además, González no habilita la entrega a un privado por cuanto LV8 saneó sus cuentas, es una estación rentable y con altos niveles de audiencia y penetración en la provincia.
En su momento, el Comfer había dicho a R&TA que se había ordenado una nueva valuación de la emisora, la que al parecer habría llegado con una diferencia de más de 150 mil pesos que la primera, sobre la que Telefónica había ofertado. Igual, ahora el organismo tendrá que buscar los papeles de nuevo y dar otra vez explicaciones ya que el tema nunca fue cerrado.